Sin temor y respeto por lo que es sagrado, el ser humano se olvida de que Dios existe.
En la sociedad actual, hay un movimiento para borrar de la conciencia de las personas lo que es sagrado para Dios.
Esta es una acción espiritual del mal, una estrategia del diablo, porque lo sagrado significa que algo o alguien está separado para un propósito Divino, y todo lo que es sagrado apunta hacia el Altísimo.
El mal quiere borrar de la mente de los seres humanos lo que es sagrado para que nunca piensen en Dios. Después de todo, si nada fuera sagrado, Dios no existiría.
El Señor trabaja para diferenciar las cosas, porque estar separado significa orden, disciplina, autoridad y obediencia. El Reino de Dios es disciplina, y es imposible que haya orden sin considerar ciertas cosas como santas. En primer lugar, está Dios, luego el Espíritu Santo, la Palabra y el nombre de Jesús, que no debe usarse en vano. Las personas se acostumbraron a usarlo de cualquier manera, en bromas, o diciéndolo innecesariamente. Ten cuidado, porque Su nombre debe ser santificado en nuestros labios.
La vida, el matrimonio, la familia, el Altar, la iglesia, las ofrendas y las primicias son algunos ejemplos de las cosas santas; todo lo que está en esa lista, el Creador lo declaró como sagrado. Sin embargo, el mundo las banaliza. Vemos muertes por motivos triviales, la vida perdió valor, y el matrimonio para toda la vida ya no es lo mismo. El mundo ha perdido el temor.
«Buscad la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor». Hebreos 12:14
Rescata lo sagrado en tu vida y comienza a practicar el respeto por las cosas que el Padre designó como sagradas, porque, de la misma manera en que tratamos a Dios, Él nos trata. Si tratas a Dios con temor y reverencia, Él te cuida y te protege.